Queridos hermanos y hermanas, hoy nos reunimos para reflexionar sobre el profundo tema del mal liderazgo visto a través del lente de la Biblia. El liderazgo es un tema importante en las Escrituras y nos recuerda la responsabilidad que conlleva guiar a otros. La Biblia nos ofrece valiosas lecciones sobre lo que sucede cuando los líderes se desvían de la rectitud y llevan a las personas por mal camino.
A lo largo de la Biblia, vemos ejemplos de líderes que no cumplieron con las expectativas de Dios. Uno de esos ejemplos es el rey Saúl, el primer rey de Israel. Saúl comenzó su reinado con promesa, pero pronto dejó que el orgullo y la desobediencia echaran raíces en su corazón. En lugar de seguir los mandatos de Dios, eligió su propio camino, lo que condujo a su caída. Su historia nos enseña que la desobediencia de un líder puede llevar a la ruina personal y afectar negativamente a aquellos que lidera.
Otro ejemplo es el rey Roboam, el hijo de Salomón. Cuando se convirtió en rey, rechazó el consejo sabio y escuchó en su lugar a aquellos que aconsejaban dureza y opresión. Su decisión llevó a la división del reino, mostrándonos que la terquedad y la falta de atención al buen consejo pueden llevar a consecuencias desastrosas para una nación.
Queridos amigos, estas historias son más que relatos históricos; son lecciones para nosotros hoy. El mal liderazgo proviene de un corazón que no está alineado con la voluntad de Dios. Puede manifestarse a través del orgullo, la avaricia o la falta de sabiduría. Como seguidores de Cristo, estamos llamados a orar por nuestros líderes y hacerles responsables de los estándares de justicia y rectitud. También debemos examinar nuestras propias vidas, ya que todos tenemos esferas de influencia donde lideramos a otros.
Esforcémonos por ser líderes que reflejen el amor y la justicia de Dios, líderes que escuchen el consejo sabio y busquen servir en lugar de ser servidos. Al hacerlo, honramos a Dios y bendecimos a quienes nos rodean. Les animo a reflexionar sobre estos ejemplos y aplicar estas lecciones en su propia vida.
Queridos amigos, ahora veamos las escrituras de la Biblia a continuación que hablan sobre el mal liderazgo.
Versículos de la Biblia sobre el mal liderazgo
«Cuando los justos dominan, el pueblo se alegraMas cuando domina el impío, el pueblo gime»
— Proverbios 29:2
«Si un gobernante atiende la palabra mentirosaTodos sus servidores serán impíos»
— Proverbios 29:12
«Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, di a los pastores: Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Ay de los pastores de Israel, que se apacientan a sí mismos! ¿No apacientan los pastores a los rebaños?»
— Ezequiel 34:2
«Los opresores de mi pueblo son muchachos, mujeres se enseñorearon de él. Pueblo mío, los que te guían te engañan, tuercen el curso de tus caminos»
— Isaías 3:12
«¡Ay de los pastores que destruyen dispersan las ovejas de mi rebaño! dice Jehová»
— Jeremías 23:1
«Mas ¡ay de vosotros, escribas fariseos, hipócritas! porque cerráis el reino de los cielos delante de los hombres; pues ni entráis vosotros, ni dejáis entrar a los que están entrando»
— Mateo 23:13
«Porque los gobernadores de este pueblo son engañadores, sus gobernados se pierden»
— Isaías 9:16
«Dije: Oíd ahora, príncipes de Jacob, jefes de la casa de Israel: ¿No concierne a vosotros saber lo que es justo?»
— Miqueas 3:1
«Sus príncipes en medio de ella son como lobos que arrebatan presa, derramando sangre, para destruir las almas, para obtener ganancias injustas»
— Ezequiel 22:27
«León rugiente oso hambrientoEs el príncipe impío sobre el pueblo pobre»
— Proverbios 28:15
«¡Ay del pastor inútil que abandona el ganado! Hiera la espada su brazo, su ojo derecho; del todo se secará su brazo, su ojo derecho será enteramente oscurecido»
— Zacarías 11:17
«Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos»
— Oseas 4:6
«Pero no anduvieron los hijos por los caminos de su padre, antes se volvieron tras la avaricia, dejándose sobornar pervirtiendo el derecho»
— 1 Samuel 8:3
«Porque los pastores se infatuaron, no buscaron a Jehová; por tanto, no prosperaron, todo su ganado se esparció»
— Jeremías 10:21
«Dejadlos; son ciegos guías de ciegos; si el ciego guiare al ciego, ambos caerán en el hoyo»
— Mateo 15:14
«El príncipe falto de entendimiento multiplicará la extorsiónMas el que aborrece la avaricia prolongará sus días»
— Proverbios 28:16
«Esos perros comilones son insaciables; los pastores mismos no saben entender; todos ellos siguen sus propios caminos, cada uno busca su propio provecho, cada uno por su lado»
— Isaías 56:11
«Tus príncipes, prevaricadores compañeros de ladrones; todos aman el soborno, van tras las recompensas; no hacen justicia al huérfano, ni llega a ellos la causa de la viuda»
— Isaías 1:23
«Entonces Jesús, llamándolos, dijo: Sabéis que los gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, los que son grandes ejercen sobre ellas potestad»
— Mateo 20:25
«Cosa espantosa fea es hecha en la tierra; los profetas profetizaron mentira, los sacerdotes dirigían por manos de ellos; mi pueblo así lo quiso. ¿Qué, pues, haréis cuando llegue el fin?»
— Jeremías 5:30-31
«El rey respondió al pueblo duramente, dejando el consejo que los ancianos le habían dado; les habló conforme al consejo de los jóvenes, diciendo: Mi padre agravó vuestro yugo, pero yo añadiré a vuestro yugo; mi padre os castigó con azotes, mas yo os castigaré con escorpiones»
— 1 Reyes 12:13-14
«Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño. de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los discípulos»
— Hechos 20:29-30
«¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, lo dulce por amargo»
— Isaías 5:20
«Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí, yo estoy contra los pastores; demandaré mis ovejas de su mano, les haré dejar de apacentar las ovejas; ni los pastores se apacentarán más a sí mismos, pues yo libraré mis ovejas de sus bocas, no les serán más por comida»
— Ezequiel 34:10
«¡Ay de vosotros, escribas fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta el eneldo el comino, dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello»
— Mateo 23:23
«Me dijo entonces Jehová: Falsamente profetizan los profetas en mi nombre; no los envié, ni les mandé, ni les hablé; visión mentirosa, adivinación, vanidad engaño de su corazón os profetizan»
— Jeremías 14:14
«¡Ay de vosotros, intérpretes de la ley! porque habéis quitado la llave de la ciencia; vosotros mismos no entrasteis, a los que entraban se lo impedisteis»
— Lucas 11:52
«Queriendo ser doctores de la ley, sin entender ni lo que hablan ni lo que afirman»
— 1 Timoteo 1:7
«Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Ay de los profetas insensatos, que andan en pos de su propio espíritu, nada han visto»
— Ezequiel 13:3
«Sus príncipes en medio de ella son leones rugientes; sus jueces, lobos nocturnos que no dejan hueso para la mañana. Sus profetas son livianos, hombres prevaricadores; sus sacerdotes contaminaron el santuario, falsearon la ley»
— Sofonías 3:3-4
«Por tanto, daré a otros sus mujeres, sus campos a quienes los conquisten; porque desde el más pequeño hasta el más grande cada uno sigue la avaricia; desde el profeta hasta el sacerdote todos hacen engaño»
— Jeremías 8:10
«Para completar la maldad con sus manos, el príncipe demanda, el juez juzga por recompensa; el grande habla el antojo de su alma, lo confirman»
— Miqueas 7:3
«¡Ay de los que dictan leyes injustas, prescriben tiranía, para apartar del juicio a los pobres, para quitar el derecho a los afligidos de mi pueblo; para despojar a las viudas, robar a los huérfanos»
— Isaías 10:1-2
«Porque tanto el profeta como el sacerdote son impíos; aun en mi casa hallé su maldad, dice Jehová»
— Jeremías 23:11
«Los sacerdotes no dijeron: ¿Dónde está Jehová? los que tenían la ley no me conocieron; los pastores se rebelaron contra mí, los profetas profetizaron en nombre de Baal, anduvieron tras lo que no aprovecha»
— Jeremías 2:8
«Mas tus ojos tu corazón no son sino para tu avaricia, para derramar sangre inocente, para opresión para hacer agravio»
— Jeremías 22:17
«Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces»
— Mateo 7:15
«(A la verdad ninguno fue como Acab, que se vendió para hacer lo malo ante los ojos de Jehová; porque Jezabel su mujer lo incitaba»
— 1 Reyes 21:25
«Porque desde el más chico de ellos hasta el más grande, cada uno sigue la avaricia; desde el profeta hasta el sacerdote, todos son engañadores»
— Jeremías 6:13
«He aquí, dice Jehová, yo estoy contra los que profetizan sueños mentirosos, los cuentan, hacen errar a mi pueblo con sus mentiras con sus lisonjas, yo no los envié ni les mandé; ningún provecho hicieron a este pueblo, dice Jehová»
— Jeremías 23:32
«¡Ay de los que en sus camas piensan iniquidad maquinan el mal, cuando llega la mañana lo ejecutan, porque tienen en su mano el poder! Codician las heredades, las roban; casas, las toman; oprimen al hombre a su casa, al hombre a su heredad»
— Miqueas 2:1-2
«Jehová vendrá a juicio contra los ancianos de su pueblo contra sus príncipes; porque vosotros habéis devorado la viña, el despojo del pobre está en vuestras casas»
— Isaías 3:14
«Muchos pastores han destruido mi viña, hollaron mi heredad, convirtieron en desierto soledad mi heredad preciosa»
— Jeremías 12:10
«Sí, por cuanto engañaron a mi pueblo, diciendo: Paz, no habiendo paz; uno edificaba la pared, he aquí que los otros la recubrían con lodo suelto»
— Ezequiel 13:10
«Guardaos de los escribas, que gustan de andar con ropas largas, aman las salutaciones en las plazas, las primeras sillas en las sinagogas, los primeros asientos en las cenas; que devoran las casas de las viudas, por pretexto hacen largas oraciones; estos recibirán mayor condenación»
— Lucas 20:46-47
«También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a estos evita»
— 2 Timoteo 3:1-5
«Que dicen a los videntes: No veáis; a los profetas: No nos profeticéis lo recto, decidnos cosas halagüñas, profetizad mentiras»
— Isaías 30:10
«¡Ay del que edifica su casa sin justicia, sus salas sin equidad, sirviéndose de su prójimo de balde, no dándole el salario de su trabajo»
— Jeremías 22:13
«Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina. muchos seguirán sus disoluciones, por causa de los cuales el camino de la verdad será blasfemado, por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas. Sobre los tales ya de largo tiempo la condenación no se tarda, su perdición no se duerme»
— 2 Pedro 2:1-3
«En los profetas de Jerusalén he visto torpezas; cometían adulterios, andaban en mentiras, fortalecían las manos de los malos, para que ninguno se convirtiese de su maldad; me fueron todos ellos como Sodoma, sus moradores como Gomorra»
— Jeremías 23:14
«Porque fueron hallados en mi pueblo impíos; acechaban como quien pone lazos, pusieron trampa para cazar hombres. Como jaula llena de pájaros, así están sus casas llenas de engaño; así se hicieron grandes ricos. Se engordaron se pusieron lustrosos, sobrepasaron los hechos del malo; no juzgaron la causa, la causa del huérfano; con todo, se hicieron prósperos, la causa de los pobres no juzgaron»
— Jeremías 5:26-28
«Como fuente turbia manantial corrompidoEs el justo que cae delante del impío»
— Proverbios 25:26
«Sí, nunca lo habías oído, ni nunca lo habías conocido; ciertamente no se abrió antes tu oído; porque sabía que siendo desleal habías de desobedecer, por tanto te llamé rebelde desde el vientre»
— Isaías 48:8
«No fortalecisteis las débiles, ni curasteis la enferma; no vendasteis la perniquebrada, no volvisteis al redil la descarriada, ni buscasteis la perdida, sino que os habéis enseñoreado de ellas con dureza con violencia»
— Ezequiel 34:4
«Curan la herida de mi pueblo con liviandad, diciendo: Paz, paz; no hay paz»
— Jeremías 6:14
«A causa de los profetas mi corazón está quebrantado dentro de mí, todos mis huesos tiemblan; estoy como un ebrio, como hombre a quien dominó el vino, delante de Jehová, delante de sus santas palabras»
— Jeremías 23:9
«Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado»
— Isaías 29:13
«Antes, hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres. Pues ensanchan sus filacterias, extienden los flecos de sus mantos»
— Mateo 23:5
«Así ha dicho Jehová de los ejércitos: No escuchéis las palabras de los profetas que os profetizan; os alimentan con vanas esperanzas; hablan visión de su propio corazón, no de la boca de Jehová»
— Jeremías 23:16
«El ruin nunca más será llamado generoso, ni el tramposo será llamado espléndido. Porque el ruin hablará ruindades, su corazón fabricará iniquidad, para cometer impiedad para hablar escarnio contra Jehová, dejando vacía el alma hambrienta, quitando la bebida al sediento»
— Isaías 32:5-6
«Hay conjuración de sus profetas en medio de ella, como león rugiente que arrebata presa; devoraron almas, tomaron haciendas honra, multiplicaron sus viudas en medio de ella»
— Ezequiel 22:25
«Yo he oído lo que aquellos profetas dijeron, profetizando mentira en mi nombre, diciendo: Soñé, soñé»
— Jeremías 23:25
«Por tanto, he aquí que yo os echaré en olvido, arrancaré de mi presencia a vosotros a la ciudad que di a vosotros a vuestros padres»
— Jeremías 23:39
«Sus ricos se colmaron de rapiña, sus moradores hablaron mentira, su lengua es engañosa en su boca»
— Miqueas 6:12
«Sus atalayas son ciegos, todos ellos ignorantes; todos ellos perros mudos, no pueden ladrar; soñolientos, echados, aman el dormir»
— Isaías 56:10
«Está envanecido, nada sabe, delira acerca de cuestiones contiendas de palabras, de las cuales nacen envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas, disputas necias de hombres corruptos de entendimiento privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de ganancia; apártate de los tales»
— 1 Timoteo 6:4-5
«¿Hasta cuándo estará esto en el corazón de los profetas que profetizan mentira, que profetizan el engaño de su corazón?»
— Jeremías 23:26
«Sordos, oíd, vosotros, ciegos, mirad para ver. ¿Quién es ciego, sino mi siervo? ¿Quién es sordo, como mi mensajero que envié? ¿Quién es ciego como mi escogido, ciego como el siervo de Jehová, que ve muchas cosas no advierte, que abre los oídos no oye?»
— Isaías 42:18-20
«Vivo yo, ha dicho Jehová el Señor, que por cuanto mi rebaño fue para ser robado, mis ovejas fueron para ser presa de todas las fieras del campo, sin pastor; ni mis pastores buscaron mis ovejas, sino que los pastores se apacentaron a sí mismos, no apacentaron mis ovejas»
— Ezequiel 34:8
«Porque estos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras»
— 2 Corintios 11:13-15
«El derecho se retiró, la justicia se puso lejos; porque la verdad tropezó en la plaza, la equidad no pudo venir»
— Isaías 59:14
«¿Os es poco que comáis los buenos pastos, sino que también holláis con vuestros pies lo que de vuestros pastos queda; que bebiendo las aguas claras, enturbiáis además con vuestros pies las que quedan? mis ovejas comen lo hollado de vuestros pies, beben lo que con vuestros pies habéis enturbiado»
— Ezequiel 34:18-19
«Ovejas perdidas fueron mi pueblo; sus pastores las hicieron errar, por los montes las descarriaron; anduvieron de monte en collado, se olvidaron de sus rediles»
— Jeremías 50:6
«Por tanto, he aquí que yo estoy contra los profetas, dice Jehová, que hurtan mis palabras cada uno de su más cercano»
— Jeremías 23:30
«Como se avergüenza el ladrón cuando es descubierto, así se avergonzará la casa de Israel, ellos, sus reyes, sus príncipes, sus sacerdotes sus profetas»
— Jeremías 2:26
«Pero si ellos hubieran estado en mi secreto, habrían hecho oír mis palabras a mi pueblo, lo habrían hecho volver de su mal camino, de la maldad de sus obras»
— Jeremías 23:22
«¿Qué pensáis vosotros que majáis mi pueblo moléis las caras de los pobres? dice el Señor, Jehová de los ejércitos»
— Isaías 3:15
«Porque atan cargas pesadas difíciles de llevar, las ponen sobre los hombros de los hombres; pero ellos ni con un dedo quieren moverlas»
— Mateo 23:4
«¡Ay de los hijos que se apartan, dice Jehová, para tomar consejo, no de mí; para cobijarse con cubierta, no de mi espíritu, añadiendo pecado a pecado»
— Isaías 30:1
«¿No piensan cómo hacen que mi pueblo se olvide de mi nombre con sus sueños que cada uno cuenta a su compañero, al modo que sus padres se olvidaron de mi nombre por Baal?»
— Jeremías 23:27
«Sembraron trigo, segaron espinos; tuvieron la heredad, mas no aprovecharon nada; se avergonzarán de sus frutos, a causa de la ardiente ira de Jehová»
— Jeremías 12:13
«Los profetas profetizaron mentira, los sacerdotes dirigían por manos de ellos; mi pueblo así lo quiso. ¿Qué, pues, haréis cuando llegue el fin?»
— Jeremías 5:31