Queridos hermanos y hermanas, al reunirnos para reflexionar sobre el sagrado Día de Reposo, profundicemos en su significado espiritual y enseñanzas bíblicas. El Sábado es un día de descanso, un regalo divino de Dios, destinado a nuestra renovación y reflexión. Es un tiempo apartado para cesar de nuestras labores y enfocarnos en el Creador, quien hizo el cielo y la tierra en seis días y descansó el séptimo. El Sábado no es solo un mandamiento sino una bendición, un tiempo para hacer una pausa y apreciar las obras de Dios.
En la Biblia, el Sábado es un recordatorio del pacto de Dios con Su pueblo. Es un signo de Su fidelidad y amor, un día para recordar que somos Su creación. El Sábado nos llama a alejarnos del ajetreo de la vida y encontrar paz en Su presencia. Es un día para reunirse con seres queridos, adorar y reflexionar sobre Su palabra. El Sábado también nos enseña a confiar en la provisión de Dios, sabiendo que Él cuidará de nuestras necesidades incluso mientras descansamos.
Jesús, nuestro Señor, enfatizó el espíritu del Sábado. Nos mostró que es un día para hacer el bien, para sanar y para mostrar misericordia. Nos recordó que el Sábado fue hecho para el hombre, no el hombre para el Sábado. Esto significa que es un día para encontrar descanso en la presencia de Dios y extender ese descanso a otros a través de actos de bondad y amor.
Queridos amigos, el Sábado nos invita a renovar nuestras mentes y espíritus, a acercarnos a Dios y a disfrutar de las bendiciones de Su creación. Es un día para dejar de lado nuestras preocupaciones y encontrar consuelo en Su gracia. Al honrar el Sábado, reconocemos la soberanía de Dios en nuestras vidas y expresamos nuestra gratitud por Su amor eterno.
Queridos amigos, ahora veamos las escrituras de la Biblia a continuación que hablan sobre el Día de Reposo.
Versículos bíblicos sobre el día de reposo
«Acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; reposó el día séptimo de toda la obra que hizo. bendijo Dios al día séptimo, lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación»
— Génesis 2:2-3
«Acuérdate del día de reposo para santificarlo. Seis días trabajarás, harás toda tu obra; mas el séptimo día es reposo para Jehová tu Dios; no hagas en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni tu extranjero que está dentro de tus puertas. Porque en seis días hizo Jehová los cielos la tierra, el mar, todas las cosas que en ellos hay, reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová bendijo el día de reposo lo santificó»
— Éxodo 20:8-11
«Guardarás el día de reposo para santificarlo, como Jehová tu Dios te ha mandado. Seis días trabajarás, harás toda tu obra; mas el séptimo día es reposo a Jehová tu Dios; ninguna obra harás tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu buey, ni tu asno, ni ningún animal tuyo, ni el extranjero que está dentro de tus puertas, para que descanse tu siervo tu sierva como tú»
— Deuteronomio 5:12-14
«Seis días se trabajará, mas el día séptimo es día de reposo consagrado a Jehová; cualquiera que trabaje en el día de reposo, ciertamente morirá»
— Éxodo 31:15
«Seis días se trabajará, mas el séptimo día será de reposo, santa convocación; ningún trabajo haréis; día de reposo es de Jehová en dondequiera que habitéis»
— Levítico 23:3
«Seis días se trabajará, mas el día séptimo os será santo, día de reposo para Jehová; cualquiera que en él hiciere trabajo alguno, morirá»
— Éxodo 35:2
«Si retrajeres del día de reposo tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, lo llamares delicia, santo, glorioso de Jehová; lo venerares, no andando en tus propios caminos, ni buscando tu voluntad, ni hablando tus propias palabras, entonces te deleitarás en Jehová; yo te haré subir sobre las alturas de la tierra, te daré a comer la heredad de Jacob tu padre; porque la boca de Jehová lo ha hablado»
— Isaías 58:13-14
«Les di también mis días de reposo, para que fuesen por señal entre mí ellos, para que supiesen que yo soy Jehová que los santifico»
— Ezequiel 20:12
«Santificad mis días de reposo, sean por señal entre mí vosotros, para que sepáis que yo soy Jehová vuestro Dios»
— Ezequiel 20:20
«En aquellos días vi en Judá a algunos que pisaban en lagares en el día de reposo, que acarreaban haces, cargaban asnos con vino, también de uvas, de higos toda suerte de carga, que traían a Jerusalén en día de reposo; los amonesté acerca del día en que vendían las provisiones. También había en la ciudad tirios que traían pescado toda mercadería, vendían en día de reposo a los hijos de Judá en Jerusalén. reprendí a los señores de Judá les dije: ¿Qué mala cosa es esta que vosotros hacéis, profanando así el día de reposo? ¿No hicieron así vuestros padres, trajo nuestro Dios todo este mal sobre nosotros sobre esta ciudad? ¿vosotros añadís ira sobre Israel profanando el día de reposo? Sucedió, pues, que cuando iba oscureciendo a las puertas de Jerusalén antes del día de reposo, dije que se cerrasen las puertas, ordené que no las abriesen hasta después del día de reposo; puse a las puertas algunos de mis criados, para que en día de reposo no introdujeran carga. se quedaron fuera de Jerusalén una dos veces los negociantes los que vendían toda especie de mercancía. les amonesté les dije: ¿Por qué os quedáis vosotros delante del muro? Si lo hacéis otra vez, os echaré mano. Desde entonces no vinieron en día de reposo. dije a los levitas que se purificasen viniesen a guardar las puertas, para santificar el día del reposo. También por esto acuérdate de mí, Dios mío, perdóname según la grandeza de tu misericordia»
— Nehemías 13:15-22
«También les dijo: El día de reposo fue hecho por causa del hombre, no el hombre por causa del día de reposo. Por tanto, el Hijo del Hombre es Señor aun del día de reposo»
— Marcos 2:27-28
«Vino a Nazaret, donde se había criado; en el día de reposo entró en la sinagoga, conforme a su costumbre, se levantó a leer»
— Lucas 4:16
«Porque el Hijo del Hombre es Señor del día de reposo»
— Mateo 12:8
«Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios. Porque el que ha entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas»
— Hebreos 4:9-10
«Así ha dicho Jehová: Guardaos por vuestra vida de llevar carga en el día de reposo, de meterla por las puertas de Jerusalén. Ni saquéis carga de vuestras casas en el día de reposo, ni hagáis trabajo alguno, sino santificad el día de reposo, como mandé a vuestros padres»
— Jeremías 17:21-22
«Estando los hijos de Israel en el desierto, hallaron a un hombre que recogía leña en día de reposo. los que le hallaron recogiendo leña, lo trajeron a Moisés a Aarón, a toda la congregación; lo pusieron en la cárcel, porque no estaba declarado qué se le había de hacer. Jehová dijo a Moisés: Irremisiblemente muera aquel hombre; apedréelo toda la congregación fuera del campamento. Entonces lo sacó la congregación fuera del campamento, lo apedrearon, murió, como Jehová mandó a Moisés»
— Números 15:32-36
«Para que se cumpliese la palabra de Jehová por boca de Jeremías, hasta que la tierra hubo gozado de reposo; porque todo el tiempo de su asolamiento reposó, hasta que los setenta años fueron cumplidos»
— 2 Crónicas 36:21
«Bienaventurado el hombre que hace esto, el hijo de hombre que lo abraza; que guarda el día de reposo para no profanarlo, que guarda su mano de hacer todo mal»
— Isaías 56:2
«A los hijos de los extranjeros que sigan a Jehová para servirle, que amen el nombre de Jehová para ser sus siervos; a todos los que guarden el día de reposo para no profanarlo, abracen mi pacto»
— Isaías 56:6
«Un día de reposo salimos fuera de la puerta, junto al río, donde solía hacerse la oración; sentándonos, hablamos a las mujeres que se habían reunido»
— Hechos 16:13
«Pablo, como acostumbraba, fue a ellos, por tres días de reposo discutió con ellos»
— Hechos 17:2
«Discutía en la sinagoga todos los días de reposo, persuadía a judíos a griegos»
— Hechos 18:4
«Pues ¿cuánto más vale un hombre que una oveja? Por consiguiente, es lícito hacer el bien en los días de reposo»
— Mateo 12:12
«Por esta causa los judíos perseguían a Jesús, procuraban matarle, porque hacía estas cosas en el día de reposo. Jesús les respondió: Mi Padre hasta ahora trabaja, yo trabajo. Por esto los judíos aún más procuraban matarle, porque no solo quebrantaba el día de reposo, sino que también decía que Dios era su propio Padre, haciéndose igual a Dios»
— Juan 5:16-18
«Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo»
— Colosenses 2:16
«Uno hace diferencia entre día día; otro juzga iguales todos los días. Cada uno esté plenamente convencido en su propia mente»
— Romanos 14:5
«Pero el principal de la sinagoga, enojado de que Jesús hubiese sanado en el día de reposo, dijo a la gente: Seis días hay en que se debe trabajar; en estos, pues, venid sed sanados, no en día de reposo»
— Lucas 13:14
«Así ha dicho Jehová el Señor: La puerta del atrio interior que mira al oriente estará cerrada los seis días de trabajo, el día de reposo se abrirá; se abrirá también el día de la luna nueva»
— Ezequiel 46:1
«Diciendo: ¿Cuándo pasará el mes, venderemos el trigo; la semana, abriremos los graneros del pan, achicaremos la medida, subiremos el precio, falsearemos con engaño la balanza»
— Amós 8:5
«Guardad mis días de reposo, tened en reverencia mi santuario. Yo Jehová»
— Levítico 26:2
«Mirad que Jehová os dio el día de reposo, por eso en el sexto día os da pan para dos días. Estése, pues, cada uno en su lugar, nadie salga de él en el séptimo día»
— Éxodo 16:29
«Asimismo, que si los pueblos de la tierra trajesen a vender mercaderías comestibles en día de reposo, nada tomaríamos de ellos en ese día ni en otro día santificado; que el año séptimo dejaríamos descansar la tierra, remitiríamos toda deuda»
— Nehemías 10:31
«Les ordenaste el día de reposo santo para ti, por mano de Moisés tu siervo les prescribiste mandamientos, estatutos la ley»
— Nehemías 9:14
«Orad, pues, que vuestra huida no sea en invierno ni en día de reposo»
— Mateo 24:20
«Les decía: El Hijo del Hombre es Señor aun del día de reposo»
— Lucas 6:5
«Tú hablarás a los hijos de Israel, diciendo: En verdad vosotros guardaréis mis días de reposo; porque es señal entre mí vosotros por vuestras generaciones, para que sepáis que yo soy Jehová que os santifico»
— Éxodo 31:13
«Él les dijo: Esto es lo que ha dicho Jehová: Mañana es el santo día de reposo, el reposo consagrado a Jehová; lo que habéis de cocer, cocedlo hoy, lo que habéis de cocinar, cocinadlo; todo lo que os sobrare, guardadlo para mañana»
— Éxodo 16:23
«Acuérdate que fuiste siervo en tierra de Egipto, que Jehová tu Dios te sacó de allá con mano fuerte brazo extendido; por lo cual Jehová tu Dios te ha mandado que guardes el día de reposo»
— Deuteronomio 5:15
«Sus sacerdotes violaron mi ley, contaminaron mis santuarios; entre lo santo lo profano no hicieron diferencia, ni distinguieron entre inmundo limpio; de mis días de reposo apartaron sus ojos, yo he sido profanado en medio de ellos»
— Ezequiel 22:26
«Cada uno temerá a su madre a su padre, mis días de reposo guardaréis. Yo Jehová vuestro Dios»
— Levítico 19:3
«Cada día de reposo lo pondrá continuamente en orden delante de Jehová, en nombre de los hijos de Israel, como pacto perpetuo»
— Levítico 24:8
«Guardarán, pues, el día de reposo los hijos de Israel, celebrándolo por sus generaciones por pacto perpetuo»
— Éxodo 31:16
«No me traigáis más vana ofrenda; el incienso me es abominación; luna nueva día de reposo, el convocar asambleas, no lo puedo sufrir; son iniquidad vuestras fiestas solemnes»
— Isaías 1:13
«De mes en mes, de día de reposo en día de reposo, vendrán todos a adorar delante de mí, dijo Jehová»
— Isaías 66:23
«Porque en cierto lugar dijo así del séptimo día: reposó Dios de todas sus obras en el séptimo día»
— Hebreos 4:4
«No obstante, si vosotros me obedeciereis, dice Jehová, no metiendo carga por las puertas de esta ciudad en el día de reposo, sino que santificareis el día de reposo, no haciendo en él ningún trabajo, entrarán por las puertas de esta ciudad, en carros en caballos, los reyes los príncipes que se sientan sobre el trono de David, ellos sus príncipes, los varones de Judá los moradores de Jerusalén; esta ciudad será habitada para siempre»
— Jeremías 17:24-25
«Para ofrecer todos los holocaustos a Jehová los días de reposo, lunas nuevas fiestas solemnes, según su número de acuerdo con su rito, continuamente delante de Jehová»
— 1 Crónicas 23:31
«Él dijo: ¿Para qué vas a verle hoy? No es nueva luna, ni día de reposo. ella respondió: Paz»
— 2 Reyes 4:23
«En los casos de pleito ellos estarán para juzgar; conforme a mis juicios juzgarán; mis leyes mis decretos guardarán en todas mis fiestas solemnes, santificarán mis días de reposo»
— Ezequiel 44:24
«Mas el día de reposo, dos corderos de un año sin defecto, dos décimas de flor de harina amasada con aceite, como ofrenda, con su libación. Es el holocausto de cada día de reposo, además del holocausto continuo su libación»
— Números 28:9-10