Queridos amigos, la Palabra de Dios es un tesoro que nos ha sido dado para guía, sabiduría y alimento espiritual. Está viva y activa, más cortante que cualquier espada de dos filos, y penetra nuestros corazones y mentes con verdad y amor. La Palabra es una lámpara a nuestros pies y una luz en nuestro camino, guiándonos a través del viaje de la vida con claridad y propósito.
Al profundizar en las escrituras, encontramos que la Palabra de Dios es más que letras en una página. Es el mismo aliento de Dios, inspirada y útil para enseñar, reprender, corregir e instruir en justicia. A través de ella, estamos equipados para toda buena obra, y nuestra fe se fortalece. La Palabra revela el carácter de Dios, Sus planes para la humanidad y Sus promesas que nunca fallan.
Consideremos el ejemplo de Jesús, nuestro Salvador, quien usó la Palabra para resistir la tentación. Al enfrentarse a las mentiras del diablo, Él respondió con la escritura, mostrándonos el poder de la Palabra para superar las pruebas de la vida. De la misma manera, queridos hermanos y hermanas, debemos guardar la Palabra de Dios en nuestros corazones para no pecar contra Él. Es nuestra defensa y nuestro ataque en las batallas espirituales que enfrentamos diariamente.
La Palabra de Dios también es un espejo, reflejando nuestro verdadero yo y revelando áreas que necesitan transformación. Al meditar en ella día y noche, somos transformados de gloria en gloria, convirtiéndonos más como Cristo. Es a través de la Palabra que crecemos en gracia y conocimiento, entendiendo las profundidades del amor de Dios y Su llamado a vivir vidas santas.
Apreciemos la Palabra, leyéndola, meditándola y permitiendo que habite ricamente en nosotros. Que guíe nuestras decisiones, forme nuestros pensamientos e inspire nuestras acciones. Queridos amigos, no seamos solo oyentes de la Palabra, sino también hacedores, viviendo sus verdades en nuestra vida diaria.
Queridos amigos, ahora veamos a continuación las escrituras bíblicas que hablan sobre la Palabra de Dios.
Versículos bíblicos sobre la Palabra de Dios
«Porque la palabra de Dios es viva eficaz, más cortante que toda espada de dos filos; penetra hasta partir el alma el espíritu, las coyunturas los tuétanos, discierne los pensamientos las intenciones del corazón»
— Hebreos 4:12
«Toda la Escritura es inspirada por Dios, útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia»
— 2 Timoteo 3:16
«Lámpara es a mis pies tu palabraY lumbrera a mi camino»
— Salmos 119:105
«Así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, será prosperada en aquello para que la envié»
— Isaías 55:11
«Él respondió dijo: Escrito está: No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios»
— Mateo 4:4
«En el principio era el Verbo, el Verbo era con Dios, el Verbo era Dios»
— Juan 1:1
«Toda palabra de Dios es limpiaÉl es escudo a los que en él esperan»
— Proverbios 30:5
«¿No es mi palabra como fuego, dice Jehová, como martillo que quebranta la piedra?»
— Jeremías 23:29
«Así que la fe es por el oír, el oír, por la palabra de Dios»
— Romanos 10:17
«Tomad el yelmo de la salvación, la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios»
— Efesios 6:17
«En mi corazón he guardado tus dichosPara no pecar contra ti»
— Salmos 119:11
«La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos himnos cánticos espirituales»
— Colosenses 3:16
«Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad»
— Juan 17:17
«Él dijo: Antes bienaventurados los que oyen la palabra de Dios, la guardan»
— Lucas 11:28
«Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la palabra de Dios que vive permanece para siempre»
— 1 Pedro 1:23
«Porque recta es la palabra de Jehovátoda su obra es hecha con fidelidad»
— Salmos 33:4
«¿Con qué limpiará el joven su camino?Con guardar tu palabra»
— Salmos 119:9
«Por lo cual, desechando toda inmundicia abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas»
— Santiago 1:21
«Porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo»
— 2 Pedro 1:21
«El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu son vida»
— Juan 6:63
«Por lo cual también nosotros sin cesar damos gracias a Dios, de que cuando recibisteis la palabra de Dios que oísteis de nosotros, la recibisteis no como palabra de hombres, sino según es en verdad, la palabra de Dios, la cual actúa en vosotros los creyentes»
— 1 Tesalonicenses 2:13
«Te afligió, te hizo tener hambre, te sustentó con maná, comida que no conocías tú, ni tus padres la habían conocido, para hacerte saber que no solo de pan vivirá el hombre, mas de todo lo que sale de la boca de Jehová vivirá el hombre»
— Deuteronomio 8:3
«Esperé yo a Jehová, esperó mi almaEn su palabra he esperado»
— Salmos 130:5
«Bienaventurado el que lee, los que oyen las palabras de esta profecía, guardan las cosas en ella escritas; porque el tiempo está cerca»
— Apocalipsis 1:3
«La ley de Jehová es perfecta, que convierte el almaEl testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo»
— Salmos 19:7
«Porque Jehová da la sabiduríaY de su boca viene el conocimiento la inteligencia»
— Proverbios 2:6
«Sécase la hierba, marchítase la flor; mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre»
— Isaías 40:8
«Lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual»
— 1 Corintios 2:13
«La suma de tu palabra es verdadY eterno es todo juicio de tu justicia»
— Salmos 119:160
«El cielo la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán»
— Marcos 13:31
«Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de que por la paciencia la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza»
— Romanos 15:4
«Os he escrito a vosotros, padres, porque habéis conocido al que es desde el principio. Os he escrito a vosotros, jóvenes, porque sois fuertes, la palabra de Dios permanece en vosotros, habéis vencido al maligno»
— 1 Juan 2:14
«Fueron halladas tus palabras, yo las comí; tu palabra me fue por gozo por alegría de mi corazón; porque tu nombre se invocó sobre mí, oh Jehová Dios de los ejércitos»
— Jeremías 15:16
«Para siempre, oh JehováPermanece tu palabra en los cielos»
— Salmos 119:89
«Retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar con sana enseñanza convencer a los que contradicen»
— Tito 1:9
«Crecía la palabra del Señor, el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén; también muchos de los sacerdotes obedecían a la fe»
— Hechos 6:7
«Abre mis ojos, miraréLas maravillas de tu ley»
— Salmos 119:18
«Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día de noche meditarás en él, para que guardes hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, todo te saldrá bien»
— Josué 1:8
«Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos»
— Juan 8:31
«Ella es mi consuelo en mi aflicciónPorque tu dicho me ha vivificado»
— Salmos 119:50
«El cielo la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán»
— Mateo 24:35
«En cuanto a Dios, perfecto es su caminoY acrisolada la palabra de JehováEscudo es a todos los que en él esperan»
— 2 Samuel 22:31
«La exposición de tus palabras alumbraHace entender a los simples»
— Salmos 119:130
«Antes bien renunciamos a lo oculto vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino por la manifestación de la verdad recomendándonos a toda conciencia humana delante de Dios»
— 2 Corintios 4:2
«Mi escondedero mi escudo eres túEn tu palabra he esperado»
— Salmos 119:114
«Entonces tus oídos oirán a tus espaldas palabra que diga: Este es el camino, andad por él; no echéis a la mano derecha, ni tampoco torzáis a la mano izquierda»
— Isaías 30:21
«Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno»
— Colosenses 4:6
«Asidos de la palabra de vida, para que en el día de Cristo yo pueda gloriarme de que no he corrido en vano, ni en vano he trabajado»
— Filipenses 2:16
«Pero gracias a Dios, que aunque erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a aquella forma de doctrina a la cual fuisteis entregados»
— Romanos 6:17
«El cual, siendo el resplandor de su gloria, la imagen misma de su sustancia, quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas»
— Hebreos 1:3
«Pero la palabra del Señor crecía se multiplicaba»
— Hechos 12:24
«Leían en el libro de la ley de Dios claramente, ponían el sentido, de modo que entendiesen la lectura»
— Nehemías 8:8
«Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió»
— Hebreos 10:23
«Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación»
— 1 Pedro 2:2
«No quites de mi boca en ningún tiempo la palabra de verdadPorque en tus juicios espero»
— Salmos 119:43
«Del mandamiento de sus labios nunca me separéGuardé las palabras de su boca más que mi comida»
— Job 23:12
«Hijo mío, está atento a mis palabrasInclina tu oído a mis razones»
— Proverbios 4:20
«Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado»
— Juan 15:3